Haz del fracaso tu nuevo mejor amigo. He aquí cómo:
Cuando has tenido un revés es muy fácil empezar a pensar que siempre seguirás fracasando en esta área de tu vida. Es fácil empezar a pensar que TÚ eres realmente un fracaso.
No caigas en una profecía autocumplida tan destructiva y a veces seductora.
En su lugar, recuérdate a ti mismo que:
- El hecho de que hayas fracasado hoy o ayer no significa que vayas a fracasar la próxima vez.
- La verdad es que esto no durará el resto de tu vida si sigues avanzando, si tomas medidas y sigues aprendiendo y no te etiqueta como una especie de fracaso (excepto si decides crear esa etiqueta en tu propia cabeza).
Ver lo negativo como algo temporal y no como algo permanente es una clave esencial para tener una actitud optimista y seguir avanzando en la vida.
¿Cómo hacer del fracaso tu nuevo mejor amigo?
Aquí tienes un par de preguntas que te ayudarán a cambiar tu forma de ver el fracaso:
- ¿Qué puedo aprender de esto?
- ¿Cómo puedo ajustar mi rumbo para evitar esta trampa/cometer el mismo error y probablemente hacerlo mejor la próxima vez?
- ¿Qué puedo hacer de forma diferente la próxima vez?
Tómate tu tiempo con estas preguntas y sé honesto contigo mismo al responderlas.
No hay prisa y, aunque algunas de las respuestas pueden ser inmediatas, otras pueden tardar una hora, un día o incluso una semana en aparecer.
Perdónate a ti mismo y sigue adelante.
Sabemos que es más fácil decirlo que hacerlo. Pero una vez que se ha fracasado en algo, hay que pensar en la siguiente acción. Ser proactivo es una gran característica, y es mucho mejor que revolcarse en la tristeza y no hacer nada para cambiar la situación. Al tomar decisiones sobre tus acciones después del fracaso, puedes empezar a dirigirte hacia el éxito en lugar de quedarte estancado en el fracaso.
"La inacción genera dudas y miedo. La acción genera confianza y valor. Si quieres vencer el miedo, no te quedes sentado en casa pensando en ello. Sal y ponte a trabajar". - Dale Carnegie
Hemos creado nuestra pulsera Keep Going para recordarte que debes seguir adelante después de un momento difícil. Puedes usarla para ti oregalársela aun amigo. Ellos sentirán tu apoyo al recibirla y pensarán en ti y en la amabilidad que les mostraste cuando la miren después. Nunca se sabe qué pequeño acto de amabilidad puede cambiar la perspectiva y la vida de alguien.